El certificado energético de viviendas, más cerca de su aprobación

El gobierno sigue manteniendo en vilo tanto a los arquitectos como a aquellos que quieran vender o alquilar su vivienda por el certificado de eficiencia energética. Estando previsto para el pasado mes de enero, el ejecutivo continúa aún inmerso en su desarrollo normativo y recientemente ha llegado al Consejo de Estado, el último escalón antes de ser aprobado definitivamente por el Consejo de Ministros. El consejo de ministros podría dar luz verde al certificado energético en marzo o abril.

 

La certificación de eficiencia energética será obligatoria para los propietarios de viviendas que quieran alquilarlas o venderlas a partir de su entrada en vigor, quedando excluidos los edificios protegidos, lugares de culto o viviendas con contrato de arrendamiento por tiempo inferior a cuatro meses al año, entre otros. La certificación energética servirá para valorar y comparar la eficiencia energética de los inmuebles, con el fin de favorecer la construcción de edificios de alta eficiencia energética y la inversión en ahorro de energía de los ya existentes.

Con la calificación energética, todas las viviendas una etiqueta energética similar a las de los electrodomésticos y que indica lo eficiente que es en lo referente a consumo energético. Actualmente la etiqueta de clasificación energética está en vigor para los edificios de nueva construcción y califica cada inmueble con un código de color de la categoría “A” (la más eficiente) a la “G” (la menos eficiente).